Rabia, impotencia (no la sexual), aburrimiento, cansancio, rencor, fastidio y muchas otras sensaciones fueron las generadas por el mediocre promedio obtenido en el semestre que acabo de terminar... Sólo quería tomar cerveza (¿cuándo no?) sin embriagarme y hablar para olvidar un poco... lo medio conseguí hablando de viejos tiempos en la casa de un parcero en Bello... Mi viernes en la noche se salió del estándar de actividades en los que me había visto metido en los últimos dos años... Bien, pero sólo para salir de la rutina.
